«Propongo a Ayuntamiento y asociaciones locales que organicen reuniones prácticas, tormentas o concursos de ideas, que aprovechemos nuestro patrimonio industrial, económico, natural, geológico, enológico, arqueológico, y personal para salir de esta» (Por: José Andrés Santa)
He tenido últimamente varias conversaciones con directores de banco de nuestra ciudad.
Tras iniciar la conversación con el clásico "¿cómo vas?" rápidamente se pasa a los lamentos del "que no vaya a peor", o "a ver cuando salimos de esta", sin dejar de lado el "oye, ¿sabes quién está también en concurso?" o el "pues si no ha cerrado ya estará a punto, yo no me explico cómo aguanta"…
Tras estos alentadores prolegómenos en alguna ocasión me han dicho que hace varios años, cuando a los servicios centrales de cualquier entidad financiera situados en Murcia, Valencia, o Madrid, llegaba una operación de Yecla se solía ver muy bien, que tanto los empresarios como los ciudadanos de Yecla tenían una buena y merecida fama de ser serios, trabajadores, honrados, y buenos pagadores (en general, que de todo hay). Pero ahora, ahora es todo lo contrario, cuando llega algo de Yecla a estos servicios centrales lo mira con lupa, se ve el papel por delante, por detrás, e incluso de costado, no sea que lleve alguna sorpresa envenenada.
En definitiva, los yeclanos hemos perdido a pulso y a golpe de concurso la buena fama de serios y pagadores, aunque espero que la de honrados y trabajadores no se haya visto afectada, por la parte que me toca.
Y yo me pregunto ¿tanto hemos cambiado en apenas cinco años?. ¿ónde está aquellos empresarios que fundaron la Feria del Mueble más antigua de España?, ¿dónde están aquellos otros que justo después de la apertura de Rusia se plantaron en la Feria de Moscú a vender muebles sin conocer el mercado?, ¿o los que constituyeron un consorcio y se fueron a vender muebles a los países árabes?, ¿qué ha sido de aquel pueblo en el que cuando cerraba una empresa abrían otras cinco?, ¿dónde están aquellos que acometían un proyecto sin fijarse si habían o no subvenciones o ayudas?…
Todos esos empresarios siguen aquí, entre nosotros, pero ya no se les ve, están sin fuelle, sin ánimo para seguir adelante, castigados por los impagos de los clientes, la sequía de crédito de los bancos, el desánimo del consumo,…Ahora parece más fácil decir "virgencica que me quede como estoy" que afrontar nuevas aventuras.
Permitidme que me revele. Los yeclanos seguimos siendo diferentes a los murcianos, a los alicantinos, a los manchegos, y a cualquier otro pueblo que se nos ponga por en medio, somos como los vascos de Murcia, somos un pueblo luchador que no se rinde, y es necesario que se enteren en todo el mundo de ello, y que nosotros mismos nos olvidemos de todos esos concursos de acreedores que no es necesario citar, y de todos los fracasos. Porque quien no se cae no aprende a levantarse y ahora lo que hace falta es estar de pie, firmemente apoyado en el suelo, con la cabeza y el corazón bien altos, buscando nuevas oportunidades de negocio en el sector del mueble o en cualquier otro, todos juntos.
Propongo desde aquí al ayuntamiento y las asociaciones locales que organicen reuniones prácticas, tormentas o concursos de ideas, que aprovechemos nuestro patrimonio industrial, económico, natural, geológico, enológico, arqueológico, y personal para salir de esta.
Y que seamos capaces de volver a ser aquella isla de bonanza que había en el norte de Murcia, y que todo el mundo vuelva a decir "Yecla va bien, a pesar del resto del mundo".
