Casi con las lágrimas a flor de piel, el alcalde pedá-neo de Raspay, Miguel Rico Pacheco, ha explicado en la entrevista concedida a SIE-TE DÍAS que los daños del granizo que cayó el pasado viernes, 4 de octubre, supe-ran ya el millón de euros en una primera cuantificación. Las consecuencias han sido especialmente devastadoras para la agricultura, arrasando los cultivos de olivo y vid casi en su totalidad.
• ¿Cuáles han sido, en primer lugar, los daños personales tras la fuerte granizada del pasado viernes?
Hemos tenido tres heridos. Uno de ellos estaba en su tractor en el momento de la granizada, se quedó aislado, y, sin saber muy bien que hacer, se intentó cobijar junto a una pared, pero las piedras le hirieron y tuvieron que darle varios puntos. Otro vecino de Raspay circulaba en su furgoneta cuando el fuerte granizo le rompió el cristal lateral, que le produjo un corte en el brazo. Finalmente, un tercer hombre sufrió daños en una oreja, que también requirió varios puntos. Por suerte, fueron daños personales
• Tenemos entendido que llegó a matar a algunos animales domésticos y que ha afectado al ganado…
Sí, un vecino que tiene ganado ovino entre Raspay y Pinoso, dentro de un vallado sufrió la muerte de tres corderos y de un perro. El hombre estaba completamente hundido cuando nos lo contaba.
• ¿Cuáles son los daños materiales en las viviendas y cómo ha afectado al campo?
Lo de las viviendas ha sido un desastre. Todas las casas de Raspay, en mayor o menor medida, han sufrido desperfectos y todos los tejados están afectados. Por suerte, todo el mundo ha podido permanecer en sus domicilios, y ninguno de los 100 vecinos de la pedanía ha tenido que dejar su hogar, aunque sí enfrentarse a molestias como sacar el agua que había entrado.
En lo que respecta a la agricultura, calculamos que están afectadas entre 750 y 800 hectáreas. El olivo ha sufrido un daño del cien por cien y el viñedo, en más del 90%. La almendra ya se había cogido, pero no habrá cosecha el año que viene y los frutales están destrozados. Estos días estamos arrancando los albaricoqueros que se plantaron el pasado invierno. Hay mucha preocupación entre los vecinos, porque con la crisis económica, este palo puede ser muy dañino.
• ¿En cuanto se cuantifican las pérdidas económicas?
Las pérdidas por esta granizada pueden superar fácilmente el millón de euros. Esperamos que nos lleguen ayudas para hacer frente a esta desgracia.
• ¿Cuál ha sido el respaldo que ustedes han recibido desde el Ayuntamiento de Yecla y desde el Gobierno regional?
El Ayuntamiento de Yecla está haciendo todo lo que puede y más. Quiero dar las gracias de forma especial al alcalde, Marcos Ortuño y al concejal de Obras, Ascensio Juan. Este edil fue el primero en acudir a ayudarnos a limpiar los destrozos junto a varias personas de la brigada de Obras Municipal. En cuanto al Gobierno regional ya se han iniciado las conversaciones para saber a que tipo de compensaciones podemos optar, sobre todo para las reparaciones en las casas, que, en muchos casos, van a ser costosas. Estamos ya a la espera de que nos contesten.
También ASAJA nos asesorará a los agricultores para solicitar estas ayudas y tendremos en breve una reunión. Yo, como alcalde pedáneo, siento la obligación de ayudar a mis vecinos y es por eso que estoy solicitando propuestas al Ayuntamiento de Yecla, como que los permisos de obras para estas reparaciones no se nos cobren, o la exención en el pago de IBI de 2014 para todos los vecinos afectados.
• Por último, sabemos que usted vivió en sus carnes esta dura experiencia… ¿Cómo lo recuerda?
Tengo 78 años y nunca había vivido nada igual. La granizada comenzó a las cinco y media de la tarde y duró sólo 20 minutos, pero fue horrible. Primero cayeron solo piedras del tamaño de huevos o limones, y después comenzó la lluvia acompañada de la piedra. Yo estaba en mi cochera, y sentí tal miedo de que el techo se hundiera por la fuerza de la piedra, que me oculté bajo el remolque. Ha sido muy duro y es doloroso recordarlo.