Nadie duda que el medio ambiente interesa cada vez más a la opinión pública yeclana, una actitud que es de celebrar en este término municipal rico en entornos naturales de inusual belleza y valor ecológico. La enésima constatación ha sido la noticia que publicamos esta semana sobre el daño que habría sufrido el paraje de la Fuente del Pinar debido al movimiento de tierras que ha ocasionado la construcción de una gran balsa de riego. ANIDA, la veterana asociación de defensa de la naturaleza fue la primera en dar la voz de alarma, sumándose al poco IU y PSOE. Por su parte el Ayuntamiento ya se ha puesto a investigar el asunto y han señalado “que las obras se van a parar si detecta que no existe licencia”. Y es que son muchos los problemas que amenazan a nuestro entorno natural: sequía, macrocultivos hortofrutícolas o intentos de instalar macrogranjas porcinas. Por suerte, cada vez son más los colectivos y ciudadanos que luchan por cuidar el medio ambiente. Como la plataforma ‘Salvemos el Arabí’ que ha surgido con fuerza y hace muy pocos días celebraba unas jornadas de agricultura ecológica muy bien acogidas. Y precisamente en ese ámbito hay unos pioneros, los chavales que gestionan el huerto ecológico de AMPY (en el que ya trabajan 13 personas) que casualmente también esta semana solicitan ayuda económica para ampliar dicha iniciativa y mejorar su producción. Ejemplos que demuestran que la ecología, además de ser una forma de vida y una pasión es también una fuente de empleo, un valor que Yecla y cualquier ciudad necesita ahora y siempre.
La ecología, además de ser una pasión y una forma de vida, es un valor y una fuente de empleo que Yecla necesita
