- María Sánchez Melero -
María Amparo Soriano Varela (1996) terminó sus estudios en Historia del Arte y ahora vive en Dinamarca, un país en el que la educación es gratuita y donde está estudiando un máster en Gestión Sostenible del Patrimonio
¿Cuánto tiempo llevas en Dinamarca? ¿Qué fue lo que te llevo a irte?
Llevo ya casi dos meses en Dinamarca, tuve que mudarme antes de que comenzara el curso para buscar alojamiento. Durante mi Erasmus en Inglaterra conocí a un chico danés con el que estuve saliendo durante un tiempo y empecé a buscar información sobre los másters en inglés disponibles en Dinamarca. Así fue como descubrí que la educación aquí es gratuita y encontré lo que quería. Estoy estudiando un máster en Sustainable Heritage Management (Gestión Sostenible del Patrimonio). Es muy interdisciplinar porque incluye arqueología, antropología, historia, museología, estudios culturales. Tenía claro que quería volver a estudiar en el extranjero así que decidí aprovechar la oportunidad y lanzarme a la aventura.
¿Cómo es la vida allí?
Aarhus, la ciudad en la que vivo, es una ciudad muy joven, con una población principalmente universitaria, por lo que hay una gran oferta de actividades sociales y culturales, muchas de ellas organizadas por la misma universidad, pero accesibles a todo tipo de públicos. Siempre hay algo que hacer, pero es también un lugar muy tranquilo para vivir, sin ruido casi ni de tráfico puesto que el medio de transporte más habitual es la bicicleta. Dinamarca es uno de los países más seguros para vivir y eso se nota, por ejemplo, en cómo la gente deja todo tipo de cosas en sus jardines sin preocuparse.
¿Qué es lo que más te gusta de la ciudad en la que vives?
A pesar de ser la segunda ciudad más grande de Dinamarca, por detrás de Copenhage, es muy acogedora y no es difícil moverse en ella. En apenas media hora puedes ir del centro a una playa o a un bosque porque la naturaleza está perfectamente integrada con la ciudad.
¿A la hora de adaptarte, qué es lo que más te está costando? ¿Hablas en inglés o en danés?
Una de las cosas más complicadas es saber qué ropa ponerme cada día puesto que en apenas unas horas la temperatura puede variar muchísimo y la lluvia puede aparecer de forma totalmente inesperada. La solución es llevar capas de ropa e ir adaptándose. El idioma también es problemático a veces puesto que, aunque estoy intentando aprender, aún no hablo danés. Casi todo el mundo aquí tiene buen nivel de inglés así que la comunicación es sencilla pero, especialmente al principio, ir al supermercado podía una tarea larga al tener que traducir todas las etiquetas con los precios para saber a qué artículo correspondían. Por suerte, tengo amigos daneses que me traducen las facturas y realizan las llamadas que conllevan contestador automático.
Has podido comprobar cómo funciona el sistema universitario en Inglaterra y ahora en Dinamarca. ¿Hay muchas diferencias respecto al español? ¿Cuál prefieres?
Tanto en Inglaterra como en Dinamarca los profesores buscan mucho más la interacción del alumno, su pensamiento crítico y, sobre todo, su trabajo individual. Al menos en el área de Humanidades, en España, parece que todo se centra en pasar muchas horas en clase y de las notas de estas sale todo el temario del examen. En Dinamarca e Inglaterra, en cambio, hay muy pocas horas de clase, pero para preparar cada una de ellas es necesario leer gran cantidad de textos y depende de cada uno cómo aplicarlos. Los exámenes son muy abiertos a todo tipo de respuestas siempre y cuando puedas justificar tu opinión con argumentos válidos.
A pesar de que es un país europeo, no lo conoce mucha gente. ¿Qué destacarías de Dinamarca?
Destacaría lo que daneses definen como “hygge”. Básicamente es cualquier situación en la que hay un ambiente acogedor, con amigos, con la familia, en solitario. También destacaría el sistema económico puesto que, aunque todo es muy caro porque los impuestos son muy altos, reciben mucho a cambio: educación y sanidad gratuitos, buen sistema de transportes, grandes recursos destinados a la cultura o ayudas extra a todos los estudiantes daneses.
De Dinamarca proceden muchos de los cuentos infantiles clásicos de Hans Christian Andersen. ¿Está explotado comercial y turísticamente?
No estoy segura en el resto de Dinamarca, pero en Aarhus no parece haber un gran turismo en relación a su figura.
¿Qué es lo que más echas de menos de Yecla?
Estoy muy bien aquí. No hay nada que eche mucho de menos, pero sí que hay momentos en que me apetecería salir a cenar con mis amigas de siempre o incluso algo tan simple como ver la tele un rato con mi familia. Tengo muy claro que si estuviera en Yecla esa vida más “predecible” me aburriría, así que el estar fuera me hace valorar todo mucho más cuando voy de visita. Digamos que en realidad es una situación ideal para mí: en Dinamarca tengo exactamente el estilo de vida que quiero, pero al mismo tiempo cuando voy a España disfruto muchísimo.
¿Cuáles son tus planes de futuro? ¿Barajas la idea de quedarte en este país más a largo plazo o por el contrario quieres volver?
De momento no me lo he planteado. Ahora mismo aún estoy trabajando en hacer todo el papeleo que mudarse a otro país conlleva. Mi máster son dos años, veo muy lejano el momento de tener que tomar una decisión. Es un país que me gusta mucho por lo que si encontrara trabajo aquí, no me importaría quedarme pero tampoco descarto la posibilidad de volver o incluso viajar a otros países.