Ahora que acaba mayo. y llegado el momento de escribir la ‘Crónica yeclana’ de esta semana, todavía no he tenido ocasión de comentar con Ángel Hernández Azorín, director de la Banda de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, si cuando pensó en componer el pasodoble ‘Papelicos’ era consciente de que iban a ser precisamente los ‘’papelicos’’ los que darían el empujón definitivo para que las Fiestas de San Isidro Labrador abrazaran de una vez la declaración de Interés Turístico Nacional, ITN. Seguro de que la inspiración de Ángel surgió por ahí porque acertó de lleno.
El estreno del pasodoble ‘Papelicos’ en el Homenaje a las Peñas del pasado sábado se convirtió en la banda sonora del notición más esperado de los últimos años en torno a nuestra gran fiesta sanisidrera. Porque fiestas camperas, fiestas de la primavera, fiestas dedicadas al santo castizo y al mundo rural podemos encontrarlas a miles a lo largo de nuestra piel de toro pero ha sido la singularidad de las carrozas, construidas con millones de ‘papelicos’, la principal seña de identidad de “nuestro San Isidro” que ha destacado el ministerio a la hora de adjudicarnos la ansiada declaración ITN.
La resolución ministerial que con tanta euforia recibimos a primera hora de la tarde del viernes pasado expresaba textualmente: “La elaboración artesanal por parte de las peñas de las más de 60 carrozas que suelen participar en la Gran Cabalgata, representando aspectos relacionados con la labranza, convierten estas fiestas en unas celebraciones repletas de originalidad y de atractivo turístico para todos los visitantes que acuden a Yecla en esas fechas”. Así pues, reconozcamos el papelón que han hecho los ‘papelicos’ y las carrozas para que las Fiestas de San Isidro se distingan por todo lo alto entre todas las celebraciones sanisidreras. ¡Mejor imposible! Sobre todo en este año tan aciago en el que nos habíamos hecho a la idea de que las Fiestas pasaran corriendo cuanto antes pensando en que el año que viene ojalá vuelva todo a la normalidad.
Pero de repente la alegría saltó por los aires cuando corrió la noticia como un huracán, justamente el día anterior a la festividad de San Isidro. El viernes 14 de mayo de 2021 pasará a la historia de las Fiestas de San Isidro como una de las fechas más importantes y señaladas de la yeclana hemeroteca sanisidrera. Una sorpresa inenarrable porque nadie pensamos que el amplísimo expediente que desde hace unos cinco años ha venido elaborando minuciosamente el Ayuntamiento y la Federación y remitido hace pocas semanas al Ministerio fuera a tardar tan poco tiempo en ser resuelto. Estas Fiestas de San Isidro que queríamos olvidar cuanto antes, por la tristeza que han traído a Yecla por culpa de la pandemia, han terminado siendo las más exultantes y dichosas que recordamos de los últimos años. Y, lo que son las cosas, nunca imaginamos que unos ‘papelicos’ tan pequeños y con tanto arte colocados en las carrozas fueran a traernos una alegría tan descomunal e infinita.
