Su gran capacidad como negociador le llevó a alcanzar los primeros y más sonados acuerdos de gobernabilidad
Fue con Juan Miguel Benedito Rodríguez con quien empezamos a usar el calificativo de transversal en estas páginas. Su faceta de médico de familia, que le facilitó el contacto directo con la realidad de cientos de hogares yeclanos, y su cercanía a nivel político con todos los vecinos y concejales de distintas ideologías lo convirtieron en un hombre accesible y muy querido del que hablaba bien todo el mundo, fueran de derechas, izquierda, centro o sin afinidad ideológica conocida.
Y claro que tuvo enemigos, o adversarios, porque Benedito llevaba la política en el sangre y precisamente por ello fue también un gran negociador y gestor público con una inmensa y paciente capacidad para alcanzar consensos como los primeros y más sonados acuerdos de gobernabilidad de la reciente historia democrática de Yecla. El tiempo, ese juez inexorable que nunca se equivoca, le ha dado la razón como lo atestiguan las expresiones y testimonios de cariño que venimos escuchando estos días, desde que el pasado lunes 6 de septiembre se cumplieron los primeros 10 años de su fallecimiento.
