Jose Luis Navarro
Hace ya muchísimos años, hoy me parece casi toda una vida, que mi padre me llevó por vez primera al Monte Arabí. Yo tendría alrededor de ocho años y todavía recuerdo como si fuera ayer la imagen de su majestuosa silueta, o las impresionantes paredes de la puerta de la iglesia.
Desde ese momento, he estado profundamente enamorado de esta montaña mágica, a la que debo tanto por toda la felicidad que siempre me ha dado. Los grandes momentos que he pasado con mi familia y amigos allí, son para mi inolvidables.
Que sirva está exposición como mi sentido homenaje a nuestra montaña.
La fotografía es para mí mi manera de contar historias, de transmitir y compartir sentimientos, abordando siempre temas muy diversos.
En este proyecto, mi trabajo ha consistido en buscar y fotografíar su belleza desde un punto de vista artístico, con el deseo de poder mostrarla y compartirla.
He recorrido sus conjuntos pétreos con sus formas imposibles, de una sutileza única, disfrutando a cada paso para encontrar el mejor ángulo y la mejor luz de esas formas tan elegantes, como bellas.
Han sido más de cuatro años y más de 25.000 fotografías, muchas horas transcurridas contemplando, fotografiando y disfrutando de su infinidad de rincones peculiares y sorprendentes. Un gran proyecto personal del que me siento muy satisfecho y que culmina ahora con esta exposición. Con ella, espero contribuir a que el Monte Arabí sea más conocido, que verdaderamente se vea y valore la grandiosidad de este bello entorno.
Para mí, nuestra montaña es la mayor joya natural de Yecla, una de nuestras señas de identidad más importantes. Un lugar cada vez más conocido y valorado en nuestra región, también en las regiones más cercanas y otros muchos lugares de España. Tenemos la suerte de tener y poder disfrutar de este tesoro único, un lugar mágico, tan lleno de vida y de esa energía que lo inunda todo.
Sin duda, el Arabí es un buen reclamo para el turismo y ello es beneficioso para Yecla; no obstante, seamos muy conscientes de la importancia de que debe estar cuidado y protegido a todos los niveles.
No podemos olvidar que el Monte Arabí es un entorno muy frágil en muchos sentidos y que tenemos que cuidarlo para que nada pueda alterar sus yacimientos arqueológicos, su historia, fauna o flora, hoy amenazada por la condición humana. Por ello, hoy más que nunca, hemos de respetar la naturaleza cumpliendo las normas de cuidado establecidas en cualquiera de sus entornos naturales e históricos.
Cumpliendo con ello, en la realización de este proyecto he sido lo más cuidadoso posible para no alterar su fauna, flora o geología. Para ello he respetado siempre los ciclos de anidación y, para dejar el menor impacto en este frágil entorno, casi siempre he ido solo y con el mayor silencio posible.
Conscientemente, he dejado fuera de este proyecto fotográfico su aspecto histórico y arqueológico, la flora y la fauna, o su geología. Como explico al principio, mi trabajo se ha centrado en buscar la belleza desde un punto exclusivamente artístico. Estos otros aspectos, si bien los considero muy importantes, no me considero una persona preparada ni adecuada para abordarlos. Me consta que en Yecla tenemos personas muy cualificadas para ello.
Ya para terminar, expresar mi gratitud a la Concejalía de Cultura, personalmente a Jesús Verdú por su confianza y entrega; a Liborio Ruiz, director de La Casa de La Cultura de Yecla, al que siempre le estaré agradecido por todas las oportunidades que me ha dado para exponer mis trabajos fotográficos y por su entrega en pro del arte; y por supuesto, al pueblo de Yecla, por acoger siempre mis fotografías.
Mi enorme agradecimiento al Monte Arabí y a todos los que habéis visitado esta exposición.
