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domingo, 8 septiembre, 2024
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ENTREVISTA: JAVIER HERNÁNDEZ, PROFESOR EN IRÁN E HIJO DE ALFONSO HERNÁNDEZ

Apenas hace dos semanas que nos dejaba uno de los más inquietos y meticulosos investigadores y escritores de nuestra ciudad, Alfonso Hernández Cutillas. SIETE DÍAS repasa su figura con su hijo que también nos habla de la situación de Irán, donde reside ya diez años

Alex Delegido

¿Cómo le gustaría que fuera recordado su padre, tanto en Yecla como en Almansa tras todos estos años de labor cultural y divulgativa?
Me gustaría que fuera recordado como un amante de las tradiciones, de las raíces culturales, tanto de Yecla como de Almansa. Como una persona que no paraba hasta obtener el dato concreto que necesitaba y siempre voy a recordar lo metódico y ordenado que era cuando se sentaba a escribir. Era alguien muy interesado en la Historia local, que es una rama de la Historia que debería contar con más apoyo porque es clave para conocer muchos aspectos culturales. Hemos recibido muchas muestras de cariño y cuando llegue el momento, volveré a Teherán muy feliz por el afecto que Yecla ha mostrado por mi padre y por el reconocimiento a su trabajo. Ese cariño que hemos recibido, a veces de gente muy joven pero que lo conocía por San Isidro, por las Fiestas de la Virgen, por la AAMY o por los toros, nos reconforta y nos demuestra que su memoria seguirá viva.

¿De qué trabajos se consideraba más orgulloso ?
Él se sentía orgulloso de todos sus trabajos, pero siempre me comentaba que estaba especialmente feliz de que se hubiera podido editar “Mayordomías” en 2022 después de dos décadas en un cajón por diversos obstáculos que iban saliendo. Creo que fue un libro que le llevó un gran esfuerzo de recopilación de material. También le gustaba especialmente el libro de la historia del fútbol en Yecla, que consta de tres volúmenes de casi 600 páginas cada uno y que está sin editar. Ojalá se puedan publicar en algún momento. Y con respecto a Almansa, estaba especialmente orgulloso de “Sucedió en Almansa”, esa recopilación de noticias del siglo XX, año a año, fue muy especial para él.

¿Qué obras tenía finalizadas pero pendientes de publicación ?
Mi padre dejó terminados dos libros, uno de Almansa y otro de Yecla. Se trata de “Centenario de la Coronación Canónica de la Virgen de Belén” y “Honores y distinciones concedidos por el Ayuntamiento de Yecla”. En ambos casos creo que podrán ver la luz próximamente. Más complicado es el tema de “La historia del fútbol en Yecla”, aunque creo que si existe voluntad se puede conseguir publicar. Es una información muy valiosa de todos los partidos, alineaciones, crónicas futbolísticas… Un libro a todo color además que aunque sea en edición limitada debería publicarse. Además, aunque no es un libro propiamente dicho, también había dejado terminado el texto para el expediente para lograr la Declaración de Interés Turístico Internacional para las Fiestas de la Virgen.

Sabemos que le llenó de satisfacción el premio SIETE DÍAS a la Mejor Labor Cultural…. ¿Le hubiera gustado a su padre tener otros reconocimientos?
Siendo partícipe de lo mucho que disfrutó con el Pregón de San Isidro, creo que le hubiera encantado pregonar las Fiestas de la Virgen, algo que ya, tristemente, no podrá ser. Él vivía las Fiestas de la Virgen muy intensamente, sus primeros libros se centraron en esta temática y reunía muy buenas condiciones para haber sido presidente, pues aunaba un gran amor por la Patrona de Yecla y por las Fiestas, con un profundo conocimiento de las mismas, pues participó en la redacción de las ordenanzas.

Trabaja usted en la Universidad pública de Teherán, dando clases de literatura ¿Cómo está viviendo estos tiempos convulsos en el país tanto en lo político como en lo social?
Irán lleva tiempo sin tener el Gobierno que su gente merece y sin el respeto de muchos países europeos. El mayor impacto que hemos vivido en la Universidad fue la muerte de Masha Amini y las protestas surgidas por ello. Hubo huelgas durante bastante tiempo hasta que la situación se estabilizó. En cuanto al clima político, cada vez que Irán ha intentado acercarse a Occidente, algo ha hecho descarrilar esos planes de tímida apertura. Las sanciones que impuso Donald Trump en su época de Gobierno fueron desastrosas y eso es terrible en un país como Irán que tiene industria, tecnología pero sufre una inflación galopante. En la Universidad, por otra parte, nos abstraemos de todo esto con el estudio de los clásicos. Algunos de mis alumnos están representando “Bodas de sangre” de García Lorca, estuvimos estudiando “La Regenta”, de Leopoldo Alas ‘Clarín’ y recientemente he colaborado en la traducción al persa de “El sentimiento trágico de la vida”, de Unamuno. Llevo diez años en Irán y aunque me gustaría volver a España aquí no hay ni un solo departamento que enseñe literatura persa de manera universitaria.

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