La colección, con retratos tan impactantes como la Basílica en mitad de un desierto o su cúpula sumergida bajo las aguas oceánicas, se podrá visitar hasta el 2 de febrero
Alex Delegido
Nunca habíamos visto Yecla así. Y esperemos no verla nunca, aunque el pintor yeclano Martín Manuel (Martín Manuel García Santa), haya jugado a imaginar una Yecla onírica, desertizada, o sumergida bajo las aguas oceánicas. Retratos impactantes que forman parte de la colección “Yakka Apocalipsis”, 21 cuadros (de los que 14 corresponden a esta temática), que se podrá ver del 17 de enero al 2 de febrero en la Sala de Exposiciones de la Casa Municipal de Cultura.
El artista explica a SIETE DÍAS que “buscaba hacer algo diferente y estoy bastante influido por la situación de inestabilidad que vivimos con guerras en Europa y Oriente Medio… Y aunque los cuadros ya estaban terminados antes de desastres naturales como la DANA o los recientes incendios de Los Ángeles, estas catástrofes los dotan de más sentido. Quería llamar la atención sobre el cambio climático y advertir de que tenemos que valorar y respetar lo que tenemos. Cuidemos nuestro patrimonio y disfrutemos de él”. Martín Manuel explica que “la técnica que he utilizado es acrílico, que me permite hacer la mezcla de colores que busco y con la que llevo tiempo trabajando”. Pintar estos 21 cuadros, entre los que también hay algunos bodegones y naturalezas muertas le llevó unos ocho meses de preparación y aunque quería haber presentado esta colección en 2024 , diferentes circunstancias personales le han llevado a inaugurar la temporada pictórica del año 2025 en Yecla.
“Las pocas personas que han visto los cuadros están motivadas. Espero que la gente disfrute pero también reflexione”. Se podrá visitar de 19 a 21 horas de lunes a viernes y de 10:30 a 13 horas sábados y domingos. La inauguración, este viernes a las 20:30.
Martín Manuel estudió Bellas Artes y trabaja como diseñador industrial. En su extenso currículum está el cartel de las Fiestas de la Virgen (2016) y el de la Semana Santa de 1999. Sigue trabajando en nuevos proyectos, como un cuadro histórico y también le gustaría llevar “Yakka Apocalipsis” fuera de Yecla.