“Son las fuerzas y cuerpos de seguridad, y no nosotros, los que tienen la obligación de protegernos” afirman con angustiosa rotundidad
En época de Elecciones los vecinos de Yecla están en su pleno derecho de aprovechar la inmediatez de las urnas para recordar a los políticos que continúan a la espera de que se hagan realidad algunas peticiones que llevan tiempo demandando. Los candidatos políticos son plenamente conscientes de que atender a dichas reclamaciones prometiendo solucionarlas o hacer oídos sordos les puede suponer un aumento o disminución de votos. Aunque en esta ocasión estamos ante una exigencia que más bien ha coincidido con el tiempo electoral: nos referimos a la oleada de robos que ha movilizado a los vecinos de ‘el Lentiscar’ y ‘la Pujola’ exigiendo una reunión de carácter urgente con la Delegación del Gobierno y los candidatos a la Alcaldía de Yecla. La angustiosa sensación de desprotección que viven ha llevado a estos vecinos a organizarse para vigilar la zona, coordinándose para cubrirse las espaldas y dar la voz de alarma en el caso de detectar movimientos sospechosos. No es que se hayan organizado exactamente en patrullas de vigilancia como en otras poblaciones sino que ahora están más unidos defendiendo sus casas para dar la voz de alarma con mayor prontitud ante la escasez de control policial en nuestros campos. Por eso una de sus principales exigencias es que aumente la presencia y la plantilla de agentes de la Guardia Civil y que el cuartel de la Benemérita abra sus puertas todos los días. “Son las fuerzas y cuerpos de seguridad los que tienen el deber de protegernos y no nosotros” afirman desesperados con rotundidad porque saben que llevan toda la razón.
