Que no pueda nunca el desánimo con las inquebrantables ganas de superación de esta ciudad
Como imaginarán nuestros lectores, en la redacción de SIETE DIAS YECLA suscribimos todos y cada uno de los deseos que a primeros de 2013 están formulando todas las familias yeclanas: empleo, solidaridad, esperanza, prosperidad (que, a estas alturas, por poca que sea, será muy bienvenida). Este periódico inicia su decimocuarto año de vida atravesando esta segunda etapa de nuestra existencia con el firme propósito de empezar cuanto antes a mostrarle los titulares más esperanzadores que todos estamos esperando. Porque serán las noticias las que con mayor prontitud y certeza tomen el pulso a los días que tenemos por delante. Por desgracia el… ¡¡ya pasado 2012!! nos ha traído demasiados titulares que nunca hubiéramos querido que encabezaran nuestras páginas: cierre de empresas, eres, despidos, más y más paro, indignación y pesimismo social, desahucios, más y más pobreza… y un largo y cariacontecido etcétera que hace muy pocos años ni por asomo hubiéramos imaginado que llegaríamos a escribir o a leer en torno a esta ciudad derruida y consternada por la crisis. Pero vivir significa volver a arriesgarse cada mañana saliendo a la calle a superar todos los retos. Por eso, ¡¡feliz año 2013!! y que el desánimo no pueda nunca con las ejemplares ganas de superación que siempre han caracterizado a esta ciudad que, a pesar de los pesares, continúa siendo nuestro mejor punto de partida para iniciar el camino hacia un nuevo y esperanzador porvenir.