Desde AREMA, ASOCOMY y la Asociación de Hosteleros señalan que “algunas empresas verán en riesgo su viabilidad si esto sigue así” y varias de ellas ya están repercutiendo el alza en sus productos
Alex Delegido
175,87 euros el megavatio/hora. Este era el precio de la electricidad este miércoles, al cierre de esta edición. Un disparatado coste de la energía que se ha dejado sentir en los principales sectores de Yecla: las fábricas de muebles y tapizado, el comercio y la hostelería. Algunos de ellos señalan que “aunque no queríamos hemos tenido que repercutir esta subida en los precios de nuestros productos porque si no es inviable seguir con la actividad comercial”.
El presidente de AREMA, José Antonio Ortega, señala que “estamos pagando el doble que el verano pasado. Una factura, por poner un ejemplo de 10.000 euros en julio de 2020, ahora es de 18.000. No ha quedado más remedio que compensar esta subida aumentando el precio de algunos productos. Y las medidas del Gobierno, que son muy necesarias, las veo más enfocadas a las familias. Creo que las empresas no nos vamos a beneficiar”. Ortega indica que “por suerte, el sector del mueble tiene trabajo pero las empresas del sector no pueden soportar estos incrementos de precio a los que se vienen a sumar el encarecimiento de algunos componentes para muebles y sofás”.
El presidente de los hosteleros de Yecla, José Antonio Ruiz, indica que “algunos compañeros están pagando entre un 60 y un 80% más de luz que el pasado verano. Es intolerable y supone otro palo más en las ruedas tras el coronavirus. Nosotros tenemos muchas cámaras frigoríficas, congeladores que están conectados las 24 horas del día para conservar el género. Y no hay soluciones directas. Con recibos de entre 300 y 500 euros más, no queda otra que subir la copa, la cerveza o el café al cliente. Esperamos que ellos lo comprendan pero si no es así la viabilidad de muchos locales está comprometida”.
Finalmente, Adrián Soriano, de ASOCOMY afirma que “para nuestros asociados también se ha incrementado el recibo en torno a un 50%. Hay que tener en cuenta que es muy costosos iluminar nuestros escaparates, que son un atractivo para los clientes. Además, nos preocupa mucho que esto siga así porque en las tiendas de ropa, cuando llega el frío es necesario tener un ambiente cálido, mediante la calefacción, para que la gente pueda probarse la ropa cómodamente”.
Con todo, Soriano explica que “los más afectados son los comercios de alimentación. Carnicerías, pescaderías, tienen que tener las cámaras encendidas las 24 horas y es un gasto brutal para estos compañeros”. Desde ASOCOMY “aún no se ha repercutido el alza en nuestros productos pero no descartamos que ese momento llegue”.
La OMIC señala que “no han aumentado las protestas de los consumidores”
La responsable de la Oficina de Información al Consumidor de Yecla, la OMIC, Pepi Molina, comenta que “paradójicamente , pese a la fuerte subida del precio de la electricidad, no hemos tenido un aumento de protestas de los ciudadanos. Suelen llegar las quejas habituales porque las compañías les incluyen servicios de mantenimiento… Las quejas suelen llegar por ahí”.
Molina señala que “lo primero que debemos hacer es revisar nuestra factura y saberla interpretar. Los consejos que yo puedo dar a los consumidores son los habituales: poner los electrodomésticos en una hora que no sea punta, intentar rebajar la potencia contratada, que es algo a veces perfectamente posible y en lo que no caemos o cambiar de comercializadora. En este momento hay una mayor competencia entre ellas porque quieren captar clientes aprovechando esta terrible subida”. Molina indica que “los ciudadanos en Yecla están molestos con la subida pero aunque se quejan, pagan. Con esfuerzo, pero pagan”.
