>La comunidad educativa aporta alimentos no perecederos
>La institución atiende mensualmente a 250 familias que lo necesitan aunque la demanda de ayuda está descendiendo
Como sucede cuando llega cada mes de noviembre desde hace ya más de una década, Cáritas Interparroquial de Yecla comienza su campaña de recogida de alimentos en los centros escolares de la ciudad en la que participan, sin excepción, todos los colegios, logrando contar con la implicación de toda la comunidad escolar, desde los propios alumnos a profesores y madres y padres.
El responsable de Cáritas, José María Alonso señala que “aunque la demanda de ayuda presenta una clara tendencia a la baja en Cáritas todavía queda mucha gente a la que tenemos que asistir. De hecho, se está atendiendo a una media de 250 familias cada mes, lo que significa que se ayuda a casi 800 personas en total, que en una población como la de Yecla sigue siendo mucha gente”.
Alonso señala que “estamos mejor. El año pasado tuvimos un descenso en la demanda de un 13% con respecto al año anterior y esos datos pueden incluso ser mejores este 2017, a falta de comprobarlo cuando cerremos el ejercicio. La recuperación económica está permitiendo a muchas personas encontrar trabajo y cuando tienen una fuente de ingresos dejan de solicitar nuestras atenciones”.
MUCHOS ALIMENTOS
Todos los colegios de Yecla han recibido la información de qué tipo de alimentos deben aportar hasta el 22 de diciembre. “Lo hacemos así para no encontrarnos grandes cantidades de unas cosas y muy pocas de otras. Pero la gama es amplia: leche, arroz, legumbres, zumos, azúcar, pastas, conservas de pescados o de tomate, aceite… En los centros normalmente son los conserjes los encargados de recoger estas aportaciones que periódicamente recoge Cáritas. “Ahora contamos con 40 voluntarios, la cifra más alta en muchos años e incluso tenemos lista de espera porque no disponemos de espacio físico para albergar a todo el mundo. Estamos muy felices de poder ayudar”, concluye Alonso.