Por sus labores profesionales como psicóloga del CAVI, ella es la que mejor conoce la realidad de las mujeres maltratadas por sus parejas en Yecla.
Recuerda lo clave que es la coeducación para ir desterrando esta lacra y pide a la sociedad tener siempre en cuenta este problema más allá del 25-N
No habíamos tenido oportunidad de analizar cómo ha afectado la pandemia a los casos de violencia de género… ¿Cuándo se produjo el repunte de casos, en el confinamiento o después?
Lo primero que quiero decir es que las mujeres llevamos siglos confinadas. El confinamiento del año pasado fue sólo un añadido que ponía en riesgo a las mujeres mientras las paredes de las casas protegían al agresor. Los procesos civiles como separaciones o divorcios y las denuncias estuvieron contenidos porque el agresor tenía el control de la situación mientras duró esa situación de confinamiento por la alarma sanitaria. Cuando volvió la normalidad notamos en el CAVI un aumento de peticiones de información.
¿Cómo ha sido 2021, o más bien cómo está siendo, en cuanto a la violencia de género en Yecla?
No puedo facilitar los datos concretos que se sabrán cuando se cierre el ejercicio pero mis impresiones son que ha aumentado ligeramente el dato de mujeres nuevas que vienen al CAVI, es decir, que hay más nuevos casos. Sí puedo decir que desde 2006 hemos atendido a 848 mujeres.
Afortunadamente, en los 15 años de existencia del CAVI no hemos tenido casos muy graves pero hay mujeres en Yecla soportando malos tratos, en sus domicilios, con sus agresores a su lado… Mujeres de todas las edades, de todas las nacionalidades, de toda formación académica. Es algo que, por desgracia, puede sucederle a cualquiera. y debemos ayudarlas.
¿Cómo es más habitual que pueda una mujer romper el ciclo de la violencia, mediante una separación o divorcio, o atreviéndose primero a denunciar?
Denunciar es un problema complejo. Nosotras tenemos cada vez más casos de mujeres que inician un proceso civil, bien de separación o bien de divorcio, aunque a veces el maltratador reaccionar negativamente y no queda más remedio que poner la denuncia que en un primer momento esa mujer intentaba evitar. Y en muchos casos en Yecla estamos siendo testigos, por desgracia, de la aparición de la violencia vicaria, la que ejerce el padre sobre los hijos con el objetivo de seguir haciéndole daño a la madre.
¿Tiene la violencia vicaria consecuencias graves sobre los menores? ¿Cómo se la combate desde el CAVI?
La violencia hacia los hijos e hijas de las mujeres víctimas es real y muy dañina. Acarrea graves consecuencias en el desarrollo físico y emocional de los menores. Hay que tener en cuenta que los niños son siempre un vínculo de unión en la pareja y en muchos casos los maltratadores los utilizan para hacer daño a su ex mujer o ex pareja. Nosotras, cuando hay bases y la situación lo requiere, derivamos a los menores desde el CAVI al SAPMEX ( Servicio de Atención e Intervención para los Hijos e Hijas de Mujeres Víctimas de VIolencia de Género).
Es un servicio itinerante y especializado que viene a Yecla dos jueves cada mes para atender a estos chavales y sus necesidades. En las jornadas profesionales que vamos a celebrar con motivo del 25-N abordaremos en profundidad la violencia vicaria porque los hijos no pueden ser los grandes olvidados en la violencia de género.
¿De qué recursos humanos y materiales dispone el CAVI en Yecla?
Somos tres las profesionales que trabajamos, yo en calidad de psicóloga, Laura Díaz, que es nuestra trabajadora social y Conce Marco que se encarga de la parte jurídica. Nuestros teléfonos de cita previa son 968 75 04 07 y 900 710 061. Además, existe el SAPMEX para los menores como hemos comentado antes.
Además, el CAVAX (Centro de Atención Integral a Víctimas de Agresiones o Abusos Sexuales) es también un servicio itinerante. Para el mismo se puede pedir cita en el 900 710 061 Además, tenemos otros teléfonos como una línea de información y asesoramiento, también para víctimas de agresiones o abusos sexuales, que es el 722 515 148 y que funciona 24 horas. Por supuesto a nivel estatal está el 016 y para casos de riesgo y extrema urgencia hay que llamar al 112 para activar el protocolo policial.
Finalmente, ¿Cómo es de importante la coeducación para evitar que esta lacra vaya a más?
Es importante trabajar en prevención realizando actividades de sensibilización y fomentando relaciones igualitarias y de respeto, desmontando los mitos del amor romántico. Educar en igualdad es la mejor prevención. Hemos llevado a cabo talleres en colegios e institutos y formado también al profesorado y es algo fundamental.