La Feria de Yecla bien puede servirnos para aliviar las preocupaciones que nos ha devuelto el final del verano
E l mes de septiembre, desde el punto de vista de los ajustes y las preocupaciones económicas, se ha convertido en la “otra cuesta de enero” desde que hace años nos instaláramos en una crisis permanente: la economía, la inestabilidad laboral, la pandemia, la guerra o el confrontado ambiente político que no cesa para centrarse en los problemas que preocupan a la sociedad de verdad durante las 24 horas del día. Con el regreso de las vacaciones de verano, nos hemos instalado en la enorme preocupación que conlleva intentar hacer frente los gastos de la vuelta al cole, la cesta de la compra y los productos de primera necesidad, disparados por las nubes, la gasolina la electricidad…
Y un largo etcétera que de memoria conocen los lectores… Ante este desalentador panorama, la Feria bien puede servirnos de bálsamo para aliviar la intranquilidad. Conciertos y espectáculos gratuitos durante todos los días de esta semana unidos a la diversión de las atracciones y las casetas de marcha. Aunque irremediablemente, los nubarrones vuelvan a oscurecer el horizonte cuando el final de la Feria dé paso de nuevo a la realidad.
