Directiva de la Escuadra del Castillo III del Bastón
El pasado día 5 de junio fallecía en Madrid Juan Miguel Azorín Juan, miembro de nuestra Escuadra El Castillo III del Bastón. Juan Miguel, natural de Valencia, vino de muy joven a vivir a Yecla, siendo siempre un enamorado de sus fiestas patronales. Ingresó como socio de número de la Escuadra en 1983, siendo cabo en el año 1986 y recibiendo por su trayectoria el Trofeo Alabardero en 2016. Siempre ha sido uno de los miembros más activos y comprometidos de esta Escuadra, incluso cuando tuvo que dejar Yecla y vivir en Madrid. Juan Miguel fue el principal precursor del hermanamiento entre las ciudades de Yecla y del Barco de Ávila, al estar casado con una barcense, Ana, que siempre le ha acompañado y a la que enviamos un abrazo. Fue un gran amante de ambos pueblos y con su labor consiguió hermanarnos, promoviendo incluso que la Escuadra El Castillo participara en las fiestas del Cristo del Caño. El pasado año 2022, fue reconocido como Hijo Predilecto de San Lorenzo de Tormes (Ávila).
También tuvo Juan Miguel un papel muy destacado en la creación del himno de la Escuadra, ya que la letra la hizo su suegro, Don Francisco Mateo, con música de Don Julio Andraix.
En los últimos años, Juan Miguel, a pesar de su lucha contra la enfermedad y la distancia, no ha dejado de participar en nuestras fiestas. Ha sido uno de los impulsores de la nueva etapa que estamos viviendo y en la que la Escuadra ha pasado de estar virtualmente desaparecida, a contar con más de 30 escuadristas y un gran futuro, representado por la numerosa escuadra infantil. Ha sido un transmisor de la ilusión y el amor por las fiestas y por la Virgen del Castillo, y todos los nuevos escuadristas nos sentimos muy agradecidos de haberlo conocido. Quedan para nuestra historia todos los documentos donados por Juan Miguel, sus viajes desde Madrid para participar en unas gachasmigas con la Escuadra y su incansable labor de apoyo a la directiva durante todo el año.
Nadie llevará el banderín con tanta alegría como él lo hizo. Un abrazo a Ana, su mujer y a Álvaro, su hijo, así como al resto de familiares y amigos. Que la Virgen del Castillo os consuele en estos momentos.