Con la llegada de los centros comerciantes y las grandes superficies, el comercio de toda la vida entendió que había que unirse para ser más fuertes
Antonio M. Quintanilla Puche
Vaya por delante que estas líneas, más que un artículo a tres columnas, pretenden ser un sincero y abierto agradecimiento en mi nombre y en el de mis hermanos Ramiro y José Miguel. Y no es para menos ya que sentimos una enorme e inesperada sorpresa cuando supimos que ASOCOMY había pensado en nosotros para otorgarnos un reconocimiento en la celebración el pasado viernes del 30º aniversario de la Asociación de Comerciantes de Yecla. El motivo: recordar que fue en PubliRecord, la agencia de publicidad de Yecla que montamos los tres hermanos y donde nació el nombre y la imagen de ASOCOMY que la Asociación sigue manteniendo después de transcurridas tres décadas. José Miguel era el diseñador de logos, folletos, anuncios para prensa, revistas, carteles, folletos y vallas publicitarias; Ramiro le ponía música a los anuncios para radio, vídeo y televisión, que grabábamos con voces de famosos actores de doblaje, y un servidor llevaba la creatividad, textos y guiones, y las relaciones con los anunciantes. El nombre de ASOCOMY lo ideamos porque por aquella época trabajábamos para Asocomer, la asociación de comerciantes de Villena, y para otras de Petrer, Alcoy, Almansa o Alicante, para la cual creamos el eslogan que todavía hoy siguen utilizando: “Compra en Alicante, la millor compra del mon”.
Coincidió igualmente que diseñamos dos grandes campañas para la asociación de tiendas de muebles de nuestra ciudad, por entonces establecidas la mayoría de ellas en la carretera de Villena bajo la marca ‘El Mueble de Yecla’. Los más mayores recordarán la campaña que lanzamos en media España con la imagen de Joaquín Prat, el archiconocido presentador del famoso programa de TV1 ‘El precio justo”, con el mensaje “El mueble de Yecla, te lo dice un amigo”. La segunda campaña la protagonizamos con una ilustración de Cristóbal Colón señalando hacia Yecla en la que se leía: “Descubre el mueble de Yecla”. Con la aparición de las primeras grandes superficies y centros comerciales, aquellas tiendas de Yecla de hace 30 años, las tiendas de toda la vida, entendieron que habían llegado nuevos tiempos a los que hacer frente estando fuertemente unidos para mantener los negocios a flote.
Ese fue el porqué del estallido de las asociaciones de comerciantes en todas las poblaciones que se veían amanezadas por la imparable implantación de una competencia descomunal. Y aunque ya hayan pasado treinta años, los comercios continúan en la actualidad apostando por asociaciones como ASOCOMY para responder a la revolución que ha transformado los hábitos de consumo y la forma en la que las tiendas deben comunicarse y llegar a sus clientes para no acabar bajando la persiana. Y aunque las mentalidades de los consumidores, es decir, los compradores que todos ansiamos para nuestras empresas locales, evolucionan y cambian constantemente de costumbres, sin que nadie podamos hacer nada para evitarlo, nunca dejemos de estar convencidos de que la unión hace la fuerza. Nunca olvidemos tampoco quién ganó cuando se enfrentaron David y Goliat.
